El Pais - El capital prestado disminuye un 42% en abril y el importe de los créditos baja un 6% hasta los 106.889 euros tras el parón en las compraventas
Las hipotecas duplicaron su ritmo de descenso en abril ante el parón de las operaciones por el final de las deducciones fiscales generalizadas a la compra y las mayores restricciones al crédito en las entidades financieras. Según ha publicado hoy el Instituto Nacional de Estadística, los créditos concedidos para comprar vivienda en este mes cayeron un 38% frente al mismo periodo de 2010, frente al retroceso del 20% en tasa interanual registrado en marzo. Desde hacía dos años, abril de 2009, no se registraba un desplome tan acusado en la concesión de hipotecas.
El cierre del grifo del crédito se deja notar a su vez en el total de capital prestado para adquirir una vivienda, que se reduce un 42% hasta los 3.351 millones de euros, lo que también supone duplicar su ritmo de caída de marzo. La suma de ambas variables, capital prestado y número de créditos concedidos, se traduce en un descenso del importe medio de las hipotecas de un un 6% hasta los 106.889 euros, por encima del abaratamiento medio de la vivienda, que llegó al 4,1% en este arranque de 2001.
Por entidades, las cajas concedieron una vez más el mayor número de préstamos hipotecarios en abril con un 49,2% aunque de sus arcas no salió la mayor parte del capital. Los Bancos dieron un 37,5% del total de créditos para comprar casa del mes y libraron el 44% del dinero, un punto más que las cajas. El tipo de interés medio de abril, que fue el mes en el que el BCE subió los tipos por primera vez en dos años hasta el 1,25% desde el mínimo del 1%, fue del 4,04%, lo que supone un aumento del 3,1% en tasa interanual y un incremento del 2,5% respecto a marzo de 2011.
Con vistas al futuro, desde la Asociación de Promotores Inmobiliarios de Madrid (Asprima) se prevé que, con la tendencia al alza de los tipos de interés, la caída del volumen de hipotecas "se mantenga a lo largo del año". En una nota, la patronal de promotores explica que ello se deberá a las "exigencias de capitalización" del sector financiero.